El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y su homólogo ruso, Vladímir Putin, mantuvieron este martes una conversación telefónica de casi 90 minutos para abordar la guerra en Ucrania y la posibilidad de alcanzar un acuerdo de paz.
Según la Casa Blanca, ambos mandatarios acordaron un alto el fuego inmediato en la infraestructura energética como primer paso hacia un posible cese total de las hostilidades. Sin embargo, Putin no dio su aprobación a una tregua más amplia de 30 días, propuesta por Washington y ya aceptada por Ucrania.
Putin pone condiciones para un acuerdo de paz en Ucrania
El Kremlin reiteró que cualquier solución al conflicto debe incluir el reconocimiento de las regiones ucranianas que Rusia ha anexado, la renuncia de Ucrania a la OTAN y la reducción drástica de su Ejército. Además, Putin exigió el fin del suministro de armas y datos de inteligencia a Kiev, considerándolo una condición clave para avanzar en las negociaciones.
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La conversación se produjo en un contexto de intensos combates en el este de Ucrania. Apenas unas horas después de la llamada, las alarmas antiaéreas sonaron en Kiev y se registraron explosiones en la ciudad. Las autoridades locales instaron a la población a buscar refugio.
Por su parte, el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, advirtió que Putin no está realmente comprometido con la paz y que su exigencia de detener la ayuda militar a Ucrania solo beneficiaría a Moscú. “Intentar negociar sin Ucrania no será productivo”, afirmó Zelenski, quien pidió total transparencia en las discusiones.
Fotografía de archivo fechada que muestra al presidente estadounidense Donald J. Trump (d), mientras estrecha la mano del presidente ruso, Vladímir Putin. EFE/Michael Klimentyev/Sputnik/Kremlin
Intercambio de prisioneros y negociaciones en marcha
Durante la llamada, Putin informó a Trump sobre un acuerdo para intercambiar 175 prisioneros de guerra por bando el miércoles. Como gesto adicional, Rusia entregará a Ucrania 23 soldados gravemente heridos.
Washington confirmó que las negociaciones para un alto el fuego marítimo en el mar Negro comenzarán “de inmediato”, con el objetivo de avanzar hacia una “paz permanente”.
Sin embargo, el Kremlin expresó sus dudas sobre la capacidad de Ucrania para cumplir con los acuerdos, acusándola de haber “saboteado y violado repetidamente” tratados previos.
Trump celebra avances, pero Ucrania sigue escéptica
Tras la conversación, Trump calificó el diálogo con Putin como “muy positivo y productivo” y aseguró que ambas partes están avanzando hacia el fin del conflicto.
«Acabamos de acordar un alto el fuego inmediato en toda la infraestructura energética, con el entendimiento de que trabajaremos rápidamente para lograr un alto el fuego completo y, en última instancia, el fin de esta guerra», escribió Trump en Truth Social.
Por otro lado, el asesor especial de la Casa Blanca, Steve Witkoff, se reunió recientemente con Putin en Moscú para discutir la propuesta de tregua de 30 días, la cual sigue pendiente de aprobación por parte del Kremlin.
Zelenski, sin embargo, se mantiene escéptico sobre la verdadera disposición de Putin para cesar la guerra. “Rusia sigue bombardeando nuestras ciudades. Esto no es un juego donde solo Putin dicta las reglas”, advirtió el presidente ucraniano.
Cartel con el símbolo del ejército ruso frente a la Embajada de Estados Unidos en Moscú. EFE/EPA/Sergei Ilnitsky
Impacto en las relaciones entre EE.UU. y Rusia
Además de abordar la situación en Ucrania, Trump y Putin discutieron la necesidad de mejorar las relaciones bilaterales entre Estados Unidos y Rusia, destacando el “gran potencial” de cooperación económica y estabilidad geopolítica si se logra la paz.
Ambos mandatarios también coincidieron en la importancia de estabilizar la situación en Oriente Próximo y acordaron que “Irán nunca debería estar en posición de destruir a Israel”, según la Casa Blanca.
Este nuevo acercamiento entre Washington y Moscú marca un punto clave en el futuro de la guerra en Ucrania, aunque todavía quedan grandes obstáculos para alcanzar un acuerdo definitivo. Mientras Trump busca lograr un alto el fuego completo, Putin sigue poniendo condiciones que Kiev considera inaceptables.