Un apagón generalizado en Puerto Rico dejó a más de 224,000 personas sin acceso a agua potable el jueves por la mañana, mientras que alrededor de 1.4 millones de clientes se quedaron sin electricidad el miércoles. Este apagón masivo ha paralizado la vida cotidiana de los residentes, afectando tanto a negocios como a servicios esenciales, justo en plena Semana Santa, cuando muchas familias y turistas disfrutaban de sus vacaciones.
Las consecuencias del apagón masivo en Puerto Rico
El corte de energía, que ocurrió alrededor de las 12:40 p.m. del miércoles, fue el segundo de gran magnitud en menos de cuatro meses. El anterior apagón se produjo durante la víspera de Año Nuevo, lo que resalta la fragilidad de la infraestructura eléctrica de la isla. Según los informes de NBC News, el restablecimiento de la electricidad ha comenzado, con un 47% de los usuarios recibiendo suministro eléctrico hacia el jueves por la mañana, y se espera que el 90% de los clientes recupere la luz en las próximas 48 horas.
El apagón también afectó el suministro de agua potable, dejando a más de 300,000 personas sin acceso al servicio. Sin embargo, para la mañana del jueves, el 83% de los clientes ya había recuperado el suministro de agua potable.
Te Recomendamos
Causas del apagón: ¿qué lo provocó?
Según LUMA Energy, la compañía encargada de la transmisión y distribución de electricidad en la isla, el apagón fue causado por una combinación de factores, entre ellos una falla en el sistema de protección y la presencia de vegetación en una línea de transmisión ubicada entre Cambalache y Manatí. A pesar de este contratiempo, la empresa aseguró que su personal trabaja de manera intensa para restablecer el servicio eléctrico a la mayor cantidad posible de clientes.
“Nuestro personal está trabajando incansablemente para restablecer el servicio a las zonas afectadas lo antes posible”, destacó LUMA Energy en un comunicado. Se espera que el suministro eléctrico se recupere de manera progresiva en las siguientes 48 horas.

Una camarera trabaja en un comercio durante un apagón, en San Juan (Puerto Rico). EFE/ Thais Llorca
Impacto económico del apagón en Puerto Rico
El apagón no solo ha causado inconvenientes en la vida diaria de los puertorriqueños, sino que también ha tenido un fuerte impacto económico. Jenniffer González Colón, la gobernadora de Puerto Rico, mencionó que cada día sin electricidad representa una pérdida económica de aproximadamente 230 millones de dólares para la isla. Además, el apagón ha obligado al cierre de numerosos negocios, lo que afecta especialmente a las empresas turísticas y de comercio, sectores clave para la economía de Puerto Rico.
Este apagón llega en un momento crítico, justo durante las festividades de Semana Santa, cuando la isla recibe a miles de turistas. La situación es aún más preocupante, dado que el sistema eléctrico de Puerto Rico sigue siendo vulnerable tras el devastador paso del huracán María en 2017.
El papel de LUMA Energy en la crisis
El gobierno de Puerto Rico ha estado bajo presión debido a la gestión de LUMA Energy, que fue contratada para modernizar y operar el sistema eléctrico de la isla. Sin embargo, tras este segundo apagón de gran escala en pocos meses, muchos puertorriqueños y autoridades locales han expresado su frustración con la empresa, sugiriendo que se deben cancelar los contratos con LUMA Energy.
La gobernadora González Colón se comprometió a tomar medidas, aunque advirtió que cualquier cambio en la administración del servicio eléctrico no sería rápido. «Es inaceptable que tengamos fallas de este tipo», declaró en una rueda de prensa.
Fotografía de la Central Termoeléctrica en el barrio de Palo Seco, en Toa Baja (Puerto Rico). EFE/ Thais Llorca
Desafíos estructurales del sistema eléctrico de Puerto Rico
El apagón ha puesto en evidencia los problemas estructurales del sistema eléctrico de Puerto Rico. Tras el paso del huracán María, las autoridades han trabajado en la reconstrucción de la infraestructura eléctrica, pero el progreso ha sido lento. LUMA Energy y Genera PR, que supervisa la generación de electricidad, han sido señaladas por no cumplir con los estándares esperados en cuanto a la actualización y el mantenimiento de la red eléctrica.
José Luis Richardson, un residente afectado por el apagón, expresó: «Nuestro sistema está muy frágil». Muchos en Puerto Rico temen que la isla siga enfrentando apagones crónicos si no se realizan reformas estructurales más profundas.
La respuesta de las autoridades ante el apagón
Aunque la gobernadora González no se encontraba en la isla cuando ocurrió el apagón, regresó rápidamente para atender la crisis. En sus declaraciones, explicó que aún no había detalles claros sobre la causa exacta del corte de energía. «Tomará al menos tres días tener información preliminar sobre lo que provocó el apagón», aseguró.
Además de los problemas de electricidad, las autoridades locales también se han centrado en asegurar que los hospitales y otros servicios esenciales cuenten con energía. Brigadas de operarios fueron desplegadas para asistir a las personas mayores y a aquellas que dependen de equipos médicos electrónicos.