¿Qué ocurre tras el fallecimiento de un pontífice?
Con el fallecimiento del Papa Francisco el 21 de abril de 2025, se activaron los protocolos establecidos en la nueva edición del «Ordo Exsequiarum Romani Pontificis», aprobada por él en abril de 2024. Uno de los cambios más significativos es que la constatación de la muerte ya no se realiza en la habitación del pontífice, sino en su capilla privada, donde los médicos certifican el deceso. Esta modificación busca resaltar el carácter espiritual del momento y alejarse de formalismos excesivos.
Rol del camarlengo y destrucción de símbolos papales
Tras la certificación, el cardenal camarlengo, en este caso Kevin Farrell, asume la administración temporal de la Iglesia durante la sede vacante. Procede a retirar y destruir el Anillo del Pescador y el sello papal, símbolos del poder pontificio, para evitar su uso indebido. Además, se sella la habitación del difunto como medida de seguridad y respeto.
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Anuncio oficial y repique de campanas
Una vez realizados estos pasos, se informa al vicario de Roma y posteriormente a los fieles. Las campanas de la Basílica de San Pedro doblan en señal de luto, anunciando al mundo el fallecimiento del pontífice. Este acto marca el inicio del periodo de duelo en la Iglesia Católica.
Simplificación del ataúd y objetos simbólicos
Francisco decidió eliminar la tradición de los tres ataúdes (ciprés, plomo y roble), optando por un único féretro de madera con revestimiento de zinc. Dentro del ataúd se colocan un pergamino con un resumen de su pontificado y monedas conmemorativas: una de oro por cada año de su papado, una de plata por cada mes y una de bronce por cada día.
Exposición del cuerpo sin catafalco ni báculo
El cuerpo del Papa es trasladado a la Basílica de San Pedro, donde se expone a los fieles directamente en el ataúd abierto, sin el uso de un catafalco ni la colocación del báculo papal, rompiendo con tradiciones anteriores. Esta decisión refleja el deseo de Francisco de enfatizar su papel como pastor y discípulo de Cristo, más que como figura de poder.
Ceremonia fúnebre en la Plaza de San Pedro
El funeral se celebra en la Plaza de San Pedro, presidido por el decano o vice-decano del Colegio Cardenalicio. La ceremonia incluye lecturas bíblicas, cánticos y oraciones, siguiendo el rito establecido en el «Ordo Exsequiarum Romani Pontificis». La misa exequial es un momento de recogimiento y oración por el alma del difunto.
Sepultura en la Basílica de Santa María la Mayor
En un gesto sin precedentes, Francisco solicitó ser enterrado en la Basílica de Santa María la Mayor en Roma, en lugar de las Grutas Vaticanas. Esta elección subraya su devoción mariana y su deseo de una sepultura más sencilla y cercana al pueblo.
Inicio de los novendiales y preparación del cónclave
Concluido el funeral, comienzan los «novendiales», nueve días consecutivos de misas en honor al Papa fallecido. Paralelamente, los cardenales se reúnen para preparar el cónclave que elegirá al nuevo pontífice. Este proceso se lleva a cabo en la Capilla Sixtina, bajo estrictas medidas de confidencialidad y siguiendo las normas establecidas por la Constitución Apostólica «Universi Dominici Gregis»