José Ramírez alcanzó 250 HR y 250 robos en MLB tras una hazaña histórica en el décimo inning del partido del jueves 1 de mayo, donde los Cleveland Guardians vencieron 4-3 a los Minnesota Twins en Progressive Field.
Ramírez, el estelar tercera base dominicano, se convirtió en el primer jugador en la historia de la franquicia en lograr 250 jonrones y 250 bases robadas, un hito que lo coloca como el 24º jugador en la historia de las Grandes Ligas y el primer tercera base en alcanzar esta marca. Su robo de segunda base en la décima entrada, seguido de una carrera anotada en un sencillo de Ángel Martínez, selló la victoria tras dos interrupciones por lluvia que sumaron más de dos horas, según informó la MLB.
El momento llegó en un juego dramático, donde Ramírez empató el marcador con un sencillo que impulsó a Steven Kwan como corredor automático. Luego, aprovechando un lanzamiento de Justin Topa, robó la segunda base con un deslizamiento de cabeza, superando la etiqueta de Carlos Correa. “Me siento muy feliz por lograrlo, pero lo más importante es seguir jugando y ganar”, expresó Ramírez a través del intérprete del equipo, Agustín Rivero. El logro, celebrado por sus compañeros desde el dugout, también lo convierte en el segundo bateador ambidiestro en la historia, junto a Carlos Beltrán, en unirse a este exclusivo club.
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José Ramírez y un hito sin precedentes
A sus 32 años, Ramírez ha consolidado una carrera estelar con los Guardians, siendo el cuarto jugador en lograr este hito con un solo equipo, junto a leyendas como Robin Yount, Craig Biggio y Derek Jeter. En 2024, Ramírez bateó .279 con 39 jonrones, 39 dobles y 41 robos, quedándose a un jonrón de ser el séptimo miembro del club 40-40 en la historia de la MLB. Esta temporada, según Baseball-Reference, ya lleva cuatro jonrones y un promedio de .381 en los primeros seis juegos, destacando con un juego de tres jonrones contra los Angels el 4 de abril, igualando el récord de la franquicia con su 26º juego de múltiples jonrones.
El impacto de Ramírez trasciende las estadísticas. Su manager, Stephen Vogt, elogió su dedicación: “Es un testimonio de trabajo duro durante mucho tiempo. Es un placer verlo”. Ramírez, quien creció en Baní, República Dominicana, firmó con los Indians en 2009 por un bono de $50,000. Su ascenso desde ligas menores hasta convertirse en seis veces All-Star y cinco veces ganador del Silver Slugger refleja su constancia y versatilidad, habiendo jugado como segunda base, shortstop y jardinero izquierdo en sus primeras temporadas.
Impacto en Cleveland
El hito de Ramírez llega en un momento clave para los Guardians, que cerraron una estadía en casa con un récord de 6-4. Con 260 jonrones y 250 robos hasta el 1 de mayo de 2025, Ramírez se ubica segundo en la historia de la franquicia en jonrones (255 al cierre de 2024) y cuarto en robos (243), según MLB.com. Su capacidad para producir en situaciones clutch, como su sencillo para empatar el juego contra Minnesota, lo ha convertido en un líder indiscutible. En 2024, lideró la Liga Americana con 57 impulsadas hasta mayo y fue segundo en la liga con 118 RBI, solo detrás de Shohei Ohtani y Aaron Judge.
La comunidad dominicana en Cleveland celebró el logro, especialmente tras la reciente apertura del campo de béisbol “José Ramírez Field” en el oeste de la ciudad, financiado por Ramírez y los Guardians. Este proyecto, que costó $2.7 millones, beneficia a la población latina local, la más grande de Ohio, según el equipo.
El camino por delante
Con Ramírez en el corazón de la alineación, los Guardians enfrentan a los Chicago White Sox este fin de semana, buscando mantenerse en la cima de la División Central de la Liga Americana. Su próximo juego, programado para el 3 de mayo, espera atraer a más de 30,000 aficionados a Progressive Field, según proyecciones de la MLB. Ramírez, quien nunca se ha ponchado 100 veces en una temporada, sigue siendo un modelo de consistencia, con 681 juegos disputados de 708 posibles entre 2020 y 2024. Su legado, tanto en el campo como en su comunidad, continúa creciendo, consolidándolo como uno de los mejores jugadores de su generación.