Una nueva jornada de caos se vivió este lunes en los principales aeropuertos de Estados Unidos, donde las tormentas provocan miles de retrasos en vuelos y complican las operaciones aéreas a nivel nacional. De acuerdo con la plataforma de monitoreo FlightAware, hasta las 2:10 p.m. (hora del Este), más de 3,700 vuelos habían sido retrasados debido a tormentas eléctricas, nubosidad densa y visibilidad limitada.
Las afectaciones se concentran en los aeropuertos de Atlanta Hartsfield-Jackson, Dallas-Fort Worth, Chicago O’Hare y Denver, que reportaron cifras de retrasos en tres dígitos, dejando varados a miles de pasajeros en terminales congestionadas. En la costa este, el Aeropuerto Internacional Logan de Boston también sufrió demoras importantes debido a un fenómeno conocido como “techo bajo”, causado por la presencia de nubes bajas y espesas que dificultan las maniobras de aterrizaje.
Tormentas provocan miles de retrasos en vuelos en todo el país
Según datos de la Administración Federal de Aviación (FAA), el 8% de los vuelos en el espacio aéreo de Estados Unidos experimentó retrasos en esta jornada, en un sistema que opera, en promedio, 45,000 vuelos diarios. Las previsiones no son alentadoras: se espera que las condiciones meteorológicas adversas persistan durante la semana, afectando a terminales clave como Nueva York (JFK, LaGuardia, Newark), Filadelfia, Washington D.C., San Francisco y Los Ángeles.
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Unas personas confirman sus billetes de vuelo en el aeropuerto John F. Kennedy de Nueva York (EE.UU.). Foto de archivo: EFE/ Sarah Yáñez-richards
El informe diario de tráfico aéreo de la FAA advierte que la baja visibilidad, combinada con tormentas eléctricas severas, obligará a reducir la frecuencia de despegues y aterrizajes, lo que incrementará la posibilidad de más retrasos y cancelaciones. El Servicio Meteorológico Nacional (NWS) alertó sobre un “riesgo leve de tormentas severas” en un amplio sector del país que incluye a Luisiana, Nueva York, los Apalaches centrales, y zonas de Texas y Nuevo México.
El pronóstico contempla la posibilidad de superceldas, granizo de gran tamaño, vientos dañinos y hasta tornados aislados, condiciones que comprometen directamente la seguridad de las operaciones aéreas. Entre los aeropuertos en alerta se encuentran Atlanta, Charlotte, Miami, Fort Lauderdale, Palm Beach, Detroit, Houston y Dallas, donde podrían registrarse suspensiones temporales y desvíos de rutas.
Aerolíneas afectadas mientras tormentas provocan miles de retrasos en vuelos
Las principales aerolíneas del país se han visto obligadas a ajustar sus itinerarios ante las condiciones extremas. Las operaciones de American Airlines, Delta, United y Southwest han sido interrumpidas en varias rutas, especialmente en los corredores más transitados de la costa este y el medio oeste.
La situación ha generado reclamos de usuarios en redes sociales, especialmente en aeropuertos como el de Chicago O’Hare y el de Atlanta, donde las tormentas provocan miles de retrasos en vuelos justo en el inicio de la temporada alta de viajes. Las aerolíneas han desplegado protocolos de contingencia para reacomodar pasajeros, aunque las limitaciones logísticas y la saturación del sistema han generado frustración y largas filas en mostradores.
Además, muchas tripulaciones no han podido llegar a sus destinos programados, lo que agrava aún más el problema. La reprogramación de vuelos y la redistribución del personal se vuelven tareas complejas cuando las tormentas afectan múltiples zonas del país al mismo tiempo.
Verano complicado: tormentas provocan miles de retrasos en vuelos en EE.UU.
Los meses de junio, julio y agosto suelen ser los más problemáticos para la aviación en Estados Unidos. De acuerdo con estadísticas de la FAA y del Departamento de Transporte, aproximadamente un tercio de los retrasos en esta temporada se deben a fenómenos climáticos como tormentas, huracanes y olas de calor extremas.
El inicio de la temporada de huracanes en el Atlántico, que oficialmente comenzó el 1 de junio, también representa un factor de riesgo adicional. El pronóstico para este año anticipa una temporada activa, con entre 17 y 25 tormentas con nombre, lo que podría traducirse en más disrupciones para los viajeros.
El impacto de estas tormentas no solo afecta a los vuelos nacionales. También se han reportado demoras en rutas internacionales hacia Canadá, Europa y América Latina. Aerolíneas como JetBlue, Spirit y Frontier, que operan con alta frecuencia hacia el Caribe, han tenido que cancelar o reprogramar varios vuelos, especialmente en aeropuertos del sur de Florida.
En este contexto, las autoridades han recomendado a los pasajeros consultar continuamente los canales oficiales de las aerolíneas y aeropuertos para obtener actualizaciones en tiempo real. La FAA y el NWS han advertido que los patrones climáticos inestables podrían mantenerse al menos durante los próximos tres días, lo que obliga a los viajeros a planificar con antelación y considerar alternativas en sus trayectos.