ICE apunta a niño refugiado y enciende alarma entre defensores
Organizaciones de derechos civiles y legisladores denunciaron este viernes al Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) por arrestar a un adolescente hondureño de 17 años que se encontraba bajo cuidado en un hogar de acogida en Pensacola, Florida.
El menor, identificado como Henry, fue esposado y trasladado a un centro de detención migratoria, en un aparente incumplimiento de una política estatal vigente desde hace más de tres décadas, que prohíbe la entrega de menores indocumentados a ICE por parte del Departamento de Niños y Familias de Florida (DCF, en inglés).
Acusaciones contra el estado de Florida y el DCF
El Young Center para los Derechos de los Niños Inmigrantes fue uno de los primeros grupos en condenar el acto, señalando que el estado falló en su deber de protección al contactar a ICE. La codirectora de la organización, Kelly Albinak Kribs, calificó la intervención como una traición al sistema de cuidado temporal.
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“En lugar de proteger a este joven y mantenerlo a salvo del daño, el estado de Florida hizo lo opuesto al llamar a ICE, que entonces cruelmente lo removió de su casa de acogida con esposas y grilletes”, declaró Kribs.
La denuncia surgió tras un reportaje del Miami Herald que reveló que el adolescente había sido víctima de trata de personas y que su madre ya había sido deportada tras ingresar juntas por la frontera sur.
Legisladores exigen respuestas al estado
A raíz del caso, más de una decena de legisladores estatales, liderados por la representante demócrata Fentrice Driskell, enviaron una carta a la secretaria del DCF, Taylor Hatch, solicitando explicaciones sobre el papel de la agencia en la detención.
“Es moralmente censurable intentar completar las cuotas de deportación al enfocarse en niños vulnerables. Florida es mejor que esto, incluso si nuestro gobierno no lo es”, escribió Driskell en su cuenta oficial.
Los congresistas también cuestionaron los posibles acuerdos entre el DCF y las autoridades federales de inmigración, en el marco de los convenios 287(g), que permiten a las autoridades locales colaborar directamente con ICE.
La política migratoria de Florida bajo la lupa
El caso se produce en medio de un endurecimiento de las políticas migratorias bajo el liderazgo del gobernador Ron DeSantis, quien ha impulsado activamente la cooperación de los 67 condados del estado con ICE. Florida se ha convertido en uno de los principales estados en implementar deportaciones rápidas y operativos coordinados.
Este enfoque ha sido criticado por defensores de los derechos humanos, quienes denuncian que las medidas han llevado a la separación familiar y al aumento del miedo entre las comunidades migrantes.
Reacciones divididas incluso entre republicanos
La senadora estatal Ileana García, republicana y fundadora de Latinas for Trump, también se mostró crítica con la actuación del gobierno, dirigiendo su señalamiento al asesor presidencial Stephen Miller, conocido por diseñar las medidas migratorias más estrictas de la administración Trump.
“Miller ha incluido a menores indocumentados en el sistema de acogida en sus esfuerzos para cumplir desesperadamente una cuota semanal de deportaciones. Estos niños son recogidos en casas donde deberían sentirse seguros. Esto es inaceptable”, dijo García a través de la red social X.
Aunque García ha sido una aliada constante del presidente Trump, su crítica sugiere que el caso de Henry podría abrir una grieta en el consenso conservador sobre el manejo de menores migrantes no acompañados o víctimas de trata.
Organizaciones piden freno a la criminalización de niños migrantes
Diversas ONG, entre ellas el American Immigration Council y Human Rights Watch, advirtieron que el caso de Henry podría sentar un precedente peligroso para otros menores en situaciones similares. Insisten en que el sistema de acogida debe proteger a los niños migrantes, no convertirlos en objetivos para deportación.
“El uso de esposas y grilletes con un menor que ha sufrido trata de personas no es solo inhumano, es ilegal bajo múltiples estándares internacionales de derechos humanos”, señaló un portavoz del Young Center.
Mientras continúa el proceso legal del joven, su situación migratoria sigue sin resolverse y defensores legales piden una revisión urgente de su caso, así como la suspensión de cualquier deportación inmediata.