Bayern arrasa: 10 goles y un récord en el Mundial de Clubes
El Bayern Munich debutó en el nuevo formato del Mundial de Clubes 2025 con una actuación demoledora ante el Auckland City, campeón de Oceanía. El equipo alemán, dirigido por Vincent Kompany, no solo se impuso desde el minuto uno, sino que firmó un abultado 10-0 que ya es récord en la historia del torneo internacional.
El primer tanto llegó apenas a los 5 minutos y 19 segundos de iniciado el encuentro, cortesía de Kingsley Coman, quien abrió el marcador con un certero cabezazo tras una asistencia de Jonathan Tah. Desde entonces, el partido se convirtió en una exhibición de superioridad técnica y física del conjunto bávaro.
Un rival sin respuesta: Auckland, totalmente superado
La diferencia entre ambos equipos fue abismal. El Auckland City apenas logró pasar del medio campo durante los primeros 30 minutos del partido. Encerrado en su área y sin respuestas tácticas, el conjunto neozelandés quedó completamente expuesto ante la intensidad del campeón alemán.
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A pesar de alinear un bloque defensivo compacto, el equipo de Oceanía no pudo contener la avalancha ofensiva del Bayern. Joshua Kimmich, Kingsley Coman y Sacha Boey se combinaron en una jugada precisa para anotar el segundo gol al minuto 17. Solo dos minutos después, Michael Olise colocó el 3-0 con un remate imparable.
Olise, quien vive una temporada consagratoria, no se detuvo ahí. Anotó un segundo gol antes del descanso, acumulando también una asistencia en el primer tiempo, y reafirmando su condición de estrella emergente en el fútbol europeo.
Musiala y Müller se suman a la fiesta
En la segunda mitad, el Bayern no bajó el ritmo. El regreso de Jamal Musiala, tras más de dos meses de baja por lesión, fue una de las notas destacadas del encuentro. El joven mediocampista alemán se estrenó en el marcador con el séptimo gol del encuentro, tras una jugada individual que culminó con un disparo desde la frontal del área.
Musiala no se conformó con un gol. Completó un ‘hat-trick’ con otras dos definiciones que confirmaron su total recuperación y su importancia en el esquema de Kompany. Thomas Müller, por su parte, también firmó un doblete, sellando el 10-0 definitivo con un remate de primera intención.
Récord y mensaje al resto de participantes
La goleada no solo representa la mayor en la historia del Mundial de Clubes, superando el 9-1 que el Al Sadd había logrado en 2011, sino que también envía un claro mensaje a los otros grandes equipos participantes en esta edición: el Bayern Munich llega con todo.
La nueva versión del torneo, organizada por la FIFA con sede rotativa y participación ampliada, busca posicionarse como una competencia global de peso similar a la Champions League. Este resultado refuerza la narrativa de que los clubes europeos siguen estando varios escalones por encima de otras confederaciones en cuanto a calidad de plantilla y preparación.
Jóvenes promesas y regresos esperados
Además de los nombres habituales, el técnico Vincent Kompany aprovechó el amplio margen en el marcador para dar minutos a varias jóvenes promesas. Lennart Karl, extremo de solo 17 años, debutó con el primer equipo del Bayern. Mostró atrevimiento, velocidad y buenos gestos técnicos, en lo que podría marcar el inicio de una carrera prometedora en la élite.
También se produjo el esperado regreso de Dayot Upamecano, otro de los lesionados que no había tenido acción desde marzo. El central francés completó más de media hora de juego sin complicaciones, un paso importante para retomar su lugar en el eje defensivo bávaro.
Próximo rival y expectativas
Con esta victoria, el Bayern lidera su grupo con una diferencia de goles que ya parece inalcanzable. Su próximo rival será el ganador del duelo entre el Seattle Sounders (MLS) y el Wydad Casablanca (Marruecos), un partido que podría definir si los bávaros enfrentan más resistencia en su camino hacia el título mundial.
El debut del conjunto alemán no solo quedará registrado por su contundencia, sino también por el mensaje que lanza: el Bayern Munich quiere el trofeo, y está dispuesto a arrasar para conseguirlo.