El gobierno de Estados Unidos ofrece una alternativa de ingreso temporal para quienes buscan iniciar un negocio en el país. Se trata del permiso para emprendedores extranjeros, conocido oficialmente como International Entrepreneur Parole Program (IEPPP), administrado por el Departamento de Seguridad Nacional (DHS).
Este mecanismo está diseñado para atraer fundadores de start-ups con alto potencial de crecimiento, innovación y generación de empleo. Aunque no es una visa, permite a los seleccionados vivir y trabajar legalmente en EE.UU. por un periodo inicial de hasta 30 meses, con posibilidad de extensión si su empresa demuestra impacto económico positivo.
¿Qué es el permiso para emprendedores extranjeros?
El permiso para emprendedores extranjeros no otorga una residencia permanente, pero permite al solicitante operar su empresa desde Estados Unidos bajo condiciones específicas. El programa fue establecido en 2017 por el Servicio de Ciudadanía e Inmigración (USCIS), y se ha mantenido vigente con actualizaciones recientes, la última en octubre de 2024.
Te Recomendamos
El objetivo del IEPPP es fomentar la innovación, impulsar la economía local y posicionar a EE.UU. como un destino atractivo para el talento emprendedor global. Para acceder al programa, el solicitante debe presentar el formulario I-941 y cumplir con requisitos tanto personales como empresariales.
Mujeres trabajando. Foto: EFE
Entre los criterios principales, el solicitante debe haber fundado una empresa legalmente constituida en EE.UU. en los últimos cinco años, poseer al menos el 10 % de participación en el negocio y desempeñar un rol activo en su gestión.
Requisitos clave del permiso para emprendedores extranjeros
Para calificar al permiso para emprendedores extranjeros, la start-up debe estar legalmente establecida bajo leyes estatales o federales, tener menos de cinco años de existencia y demostrar potencial para contribuir significativamente a la economía nacional.
Uno de los requisitos centrales es haber recibido una inversión de capital privado de al menos 311.071 dólares en los 18 meses anteriores a la solicitud. Este monto fue ajustado recientemente según el índice de inflación oficial (CPI-U). La inversión debe provenir de fuentes calificadas, como ciudadanos estadounidenses, residentes permanentes o entidades controladas por estos.
También se acepta, como alternativa, que la empresa haya recibido un subsidio de al menos 109.242 dólares por parte de una agencia federal, estatal o local. Este respaldo económico debe haber sido otorgado dentro de los 18 meses previos a la presentación del formulario.
Trabajadores en el campo. EFE
Es importante destacar que el dinero no puede provenir del propio solicitante ni de familiares directos, y tampoco se aceptan contratos por servicios ni fondos de gobiernos extranjeros.
El permiso permite que hasta tres fundadores por start-up apliquen simultáneamente, siempre que cada uno cumpla con los requisitos y justifique su papel activo en la empresa.
¿Cómo se solicita el permiso para emprendedores extranjeros?
La solicitud del permiso para emprendedores extranjeros se realiza a través del formulario I-941 ante el USCIS. La persona puede encontrarse ya en Estados Unidos –bajo otro estatus migratorio– o aplicar desde el extranjero. En algunos casos, será necesario salir del país y reingresar formalmente si se requiere un nuevo proceso de admisión.
La documentación exigida incluye evidencia de la fundación de la empresa, prueba de inversión o subsidio, descripción del modelo de negocio, historial del solicitante y plan de impacto económico. USCIS revisa cada caso individualmente, y actualmente no existe un límite anual de admisiones bajo este programa.
La autorización inicial tiene una duración de hasta 30 meses. Si durante ese tiempo la empresa demuestra avances en ingresos, expansión o generación de empleos, el permiso puede renovarse por un periodo adicional similar. No obstante, los beneficiarios solo pueden trabajar en la empresa relacionada con su solicitud.
¿Qué ventajas ofrece este permiso frente a otras vías migratorias?
El permiso para emprendedores extranjeros es una de las pocas opciones migratorias que reconoce la actividad empresarial como un motor de desarrollo económico sin requerir patrocinio laboral ni residencia previa.
A diferencia de visas como la H-1B o la L-1, no depende de empleadores ni de traslados corporativos. Además, permite a los fundadores mantener control sobre su empresa, sin necesidad de renunciar a su participación accionaria.
Tampoco se exige una nacionalidad específica, lo que lo convierte en una opción viable para emprendedores latinoamericanos con proyectos innovadores y capital suficiente para operar en EE.UU.
Este mecanismo ha sido respaldado por diversas cámaras de comercio, fondos de inversión y organizaciones de tecnología, que lo consideran clave para mantener la competitividad del ecosistema de start-ups en Estados Unidos.
Información actualizada y recursos oficiales
El permiso para emprendedores extranjeros sigue vigente y actualizado. El USCIS mantiene habilitado un portal informativo donde se encuentran las guías oficiales, requisitos actualizados y formularios correspondientes. También se ofrecen recursos para orientación legal y apoyo técnico en el proceso de aplicación.
Los interesados pueden revisar la página oficial del USCIS (uscis.gov) y consultar con abogados especializados en inmigración empresarial para evaluar si su perfil y empresa califican al programa.
Desde su implementación formal en enero de 2017, el IEPPP ha enfrentado intentos de suspensión, pero se mantiene activo gracias al respaldo de cortes federales y decisiones administrativas favorables. La última actualización de requisitos se publicó en octubre de 2024.