El gobierno mexicano y el Senado de Estados Unidos acordaron medidas que alivian el envío de dinero desde el extranjero. La reducción de comisiones a remesas busca proteger los ingresos de millones de familias mexicanas.
La reducción de comisiones a remesas representa una noticia alentadora para millones de familias mexicanas que dependen de estos recursos. La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, celebró este miércoles la aprobación por parte del Senado estadounidense de una modificación clave: la baja del impuesto a las remesas en efectivo del 3,5% al 1%.
Este ajuste impositivo forma parte del nuevo paquete de recortes fiscales impulsado por el gobierno del presidente Donald Trump y aún debe ser ratificado por la Cámara de Representantes. La modificación establece que el impuesto del 1% solo se aplicará a remesas enviadas en efectivo, giros postales o cheques de caja. Por el contrario, los envíos electrónicos quedarán completamente exentos del tributo.
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Fotografía de archivo de una persona frente a un establecimiento de envío de dinero, en Tijuana (México). EFE/ Joebeth Terríquez
La reducción de comisiones a remesas llega en un momento clave, en medio de una leve contracción en el flujo de dinero enviado desde Estados Unidos a México. Esta decisión podría aliviar significativamente la carga financiera para quienes envían dinero a sus familiares en México, especialmente para quienes aún usan métodos tradicionales.
Reducción de comisiones a remesas: alivio para millones de mexicanos
Durante su conferencia matutina, Sheinbaum calificó el cambio como un “logro muy importante”, dado que un impuesto del 3,5% habría tenido un “impacto muy grande” sobre el ingreso de las familias mexicanas. Cabe recordar que las remesas representan alrededor del 3% del Producto Interno Bruto (PIB) de México y son la principal fuente de ingreso en muchas comunidades rurales del país.
Según datos oficiales del Banco de México, las remesas alcanzaron los 64.700 millones de dólares en 2024, un récord histórico. Sin embargo, en abril de este año se reportó una caída del 12% respecto al mismo mes del año anterior, la mayor en doce años. En mayo, los envíos se redujeron otro 4,6%, alcanzando 5.360 millones de dólares. Sheinbaum atribuyó este retroceso a las redadas masivas contra migrantes en varias ciudades estadounidenses y a la suspensión temporal de empleos.
Fotografía de archivo de personas en una institución bancaria, en el municipio San Cristóbal de las Casas, en Chiapas (México). EFE/ Carlos López
La mandataria aseguró que los datos preliminares de junio indican una recuperación en el flujo de remesas, aunque no ofreció cifras específicas. Lo que sí dejó claro es que su gobierno continuará implementando acciones para garantizar que los migrantes puedan seguir enviando dinero con menos obstáculos y costos.
Reducción de comisiones a remesas incluye facilidades con Finabien
Otra medida clave anunciada por Sheinbaum es la expansión del uso de las tarjetas de la Financiera del Bienestar (Finabien), institución del gobierno mexicano que permite realizar envíos de dinero con comisiones más bajas que las de entidades privadas. El objetivo es facilitar el acceso de los migrantes mexicanos en Estados Unidos a este sistema, evitando así mayores costos y el nuevo impuesto del 1%.
“Queremos que nuestras paisanas y paisanos puedan mandar su dinero a través de Finabien, donde las comisiones son menores, y además con plena seguridad”, explicó la mandataria. La entrega de estas tarjetas en EE.UU. será simplificada a través de consulados y oficinas móviles, una estrategia que el gobierno mexicano espera consolidar antes de fin de año.
En un inicio, Sheinbaum consideró la posibilidad de reembolsar a los migrantes el impuesto del 1% por cada envío en efectivo, pero finalmente descartó esa alternativa por motivos fiscales. En lugar de ello, su administración optó por reforzar la educación financiera entre migrantes y promover los canales digitales como alternativa libre de impuestos.
Diálogo internacional para evitar nuevas cargas a las remesas
La reducción de comisiones a remesas también es fruto de una estrategia diplomática más amplia. Desde mayo, México ha iniciado contactos con congresistas estadounidenses y con gobiernos de otros países latinoamericanos que también serían afectados por este tipo de impuestos. El objetivo es formar un frente común para evitar que en el futuro se apliquen nuevas tasas que encarezcan el envío de dinero.
Según analistas financieros, cualquier carga adicional sobre las remesas no solo afecta a las familias receptoras, sino que también impacta en la economía general del país al reducir el poder adquisitivo y el consumo en regiones donde las remesas representan la principal fuente de ingreso.
Actualmente, alrededor de 12 millones de mexicanos viven en Estados Unidos y se estima que más de la mitad de ellos realiza envíos de dinero de forma regular. Las remesas se utilizan principalmente para cubrir necesidades básicas como alimentos, educación, salud y vivienda.
Por ello, la reducción de comisiones a remesas es vista como un paso positivo tanto para los migrantes como para el gobierno mexicano, que busca mantener el flujo de divisas sin poner en riesgo la estabilidad económica de millones de hogares.