Texas: Aumentan a 119 muertos por inundaciones
Las devastadoras inundaciones que azotaron Texas el 4 de julio de 2025 han dejado al menos 119 muertos, según confirmaron autoridades el 9 de julio, mientras crecen las críticas sobre la respuesta ante la tragedia. El condado de Kerr, el más afectado, reporta 95 fallecidos, incluyendo 36 niños, y 150 personas siguen desaparecidas, entre ellas cinco campistas y un consejero de Camp Mystic. Las preguntas sobre la efectividad de las alertas y los planes de emergencia, especialmente en el campamento, persisten mientras miles de rescatistas continúan la búsqueda en un terreno cubierto de escombros.
Tragedia en el condado de Kerr
El sheriff Larry Leitha informó que, hasta las 8:00 a.m. del 9 de julio, 95 personas habían fallecido en Kerr, donde el río Guadalupe creció 26 pies en menos de una hora, arrasando hogares, vehículos y el campamento de verano Camp Mystic. Entre las víctimas hay 36 niños, muchos de ellos de este campamento cristiano para niñas, que albergaba a 750 menores. La magnitud de la catástrofe, con 68 adultos y 27 niños fallecidos en el condado, según el último reporte, ha conmocionado a Texas. Otros condados como Travis, Burnet y Kendall suman 24 muertes adicionales.
Búsqueda de desaparecidos
Más de 170 personas están desaparecidas en todo el estado, con 150 en Kerr, incluyendo cinco campistas y un consejero de Camp Mystic, según el gobernador Greg Abbott. Los equipos de rescate, con 1,750 socorristas y 975 vehículos, incluyendo helicópteros y drones, enfrentan un terreno cubierto de escombros y lodo. “No pararemos hasta encontrar a cada persona”, afirmó Abbott en una conferencia el 8 de julio. Hasta ahora, se han rescatado 850 personas, pero las esperanzas de hallar sobrevivientes disminuyen, según el jefe de la División de Emergencias de Texas, Nim Kidd.
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Críticas a la respuesta de emergencia
Las autoridades enfrentan cuestionamientos sobre la respuesta inicial. El Servicio Meteorológico Nacional emitió alertas de inundación el 3 de julio, pero no está claro si estas llegaron a tiempo a los funcionarios locales. En Kerrville, las redes sociales del sheriff y la policía no publicaron advertencias hasta después de las 6:00 a.m. del viernes, cuando el río ya había desbordado. El sheriff Leitha evitó detallar el cronograma, priorizando la identificación de víctimas. Residentes reportaron no recibir alertas de texto hasta que el agua alcanzó sus hogares, y la ausencia de sirenas de inundación, propuesta pero nunca implementada por el condado, ha generado críticas.
Fallos en el plan de Camp Mystic
Un informe estatal del 2 de julio certificó que Camp Mystic, donde murieron al menos 27 personas, tenía un plan de emergencia. Sin embargo, la tragedia ha levantado dudas sobre su ejecución. Políticas como la prohibición de celulares y el uso limitado de walkie-talkies pudieron haber retrasado la comunicación, según un consejero. La muerte del director del campamento, Dick Eastland, mientras intentaba salvar a niñas, y de menores como Hanna y Rebecca Lawrence, de 8 años, han intensificado el dolor. La campista Mary Kate Jacobe, de Houston, también fue confirmada entre las víctimas.
Medidas estatales y luto
El gobernador Abbott ordenó el 9 de julio que las banderas ondearan a media asta hasta el 14 de julio en honor a las víctimas. “Texas está de luto, pero unida en la recuperación”, dijo tras un recorrido por la zona. También anunció una sesión legislativa especial para abordar el sistema de alertas, criticado por el vicegobernador Dan Patrick, quien sugirió sirenas como las usadas en Israel. El presidente Donald Trump aprobó una declaración de desastre federal, destinando $500 millones en fondos iniciales para Kerr y otros condados. Mientras, organizaciones como la Fundación Comunitaria de Texas Hill Country han recaudado $2 millones para las víctimas, y las protestas del 17 de julio podrían exigir reformas en la gestión de emergencias.