El arresto de Marino Ysidro Ramos, un joven vendedor ambulante de 23 años, por parte de agentes del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), ha desatado una ola de indignación y temor en la comunidad latina de Los Ángeles. El incidente, registrado por cámaras de seguridad, ocurrió el pasado 4 de julio, cuando Ramos fue interceptado mientras trabajaba junto a su esposa y su padre en una zona comercial.
El joven, que intentó aferrarse a un portón metálico para evitar ser detenido, fue finalmente sometido por los agentes y trasladado a un centro de detención en Arizona. Su familia solo ha podido comunicarse con él una vez desde su captura, y vive con la angustia de no saber qué pasará con su caso.
La detención de ICE generó trauma y miedo en toda la familia
“Tenemos miedo de salir a la calle, andamos traumados. Ni ganas de salir a trabajar”, dijo Ysidro Ramos, padre del joven arrestado, en entrevista con medios locales. La familia, dedicada a la venta ambulante desde hace una década, ha dejado sus puestos vacíos desde el operativo, y no saben cuándo podrán retomar sus actividades con normalidad.
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Oficiales de distintas instituciones son parte de estas redadas migratorias. Foto: EFE
En el video del arresto, se puede observar a Marino siendo sostenido por al menos dos agentes de ICE, mientras se aferra con desesperación a la reja. Un testigo que intenta intervenir le pregunta a uno de los oficiales por un número telefónico para notificar a su familia: “Dame un número, bro”, se escucha decir.
Ovette, esposa de Marino, fue testigo directa del hecho y describió el momento con angustia. “En mi mente solo pensaba: Dios mío, dame fuerzas para correr”, relató. Agregó que aún recuerda el rostro de su esposo mientras era sujetado por cinco oficiales.
Marino logró realizar una breve llamada telefónica desde el centro de detención. “Me dijo que me cuidara porque ya lo había agarrado migración. También me dijo ‘te amo y te quiero’, solo eso alcanzó a decirme”, compartió Ovette.
La polémica detención de ICE ocurre en medio de redadas masivas en California
Este caso no es un hecho aislado. En los últimos días, ICE ha intensificado su presencia en el sur de California. Según el Departamento de Seguridad Nacional (DHS), el mismo día del arresto de Marino, se llevaron a cabo redadas simultáneas en granjas legales de marihuana, resultando en la detención de aproximadamente 200 inmigrantes.
Uno de estos operativos, en el condado de Ventura, generó un fuerte enfrentamiento entre agentes federales y manifestantes. Según las autoridades, los agentes fueron atacados a tiros. Sin embargo, representantes de sindicatos agrícolas alegan que un trabajador murió tras el operativo, en circunstancias que aún no han sido esclarecidas.
Oficiales del ICE arrestan a una persona indocumentada. Foto: EFE
Estos sucesos han provocado alarma en la región, especialmente en comunidades inmigrantes que se sienten más vulnerables ante las políticas migratorias actuales. Las detenciones han sido criticadas por organizaciones civiles, líderes religiosos y sindicales, quienes denuncian un clima de persecución.
Protestas y medidas de protección tras la detención de ICE en Los Ángeles
Las reacciones no se han hecho esperar. La alcaldesa de Los Ángeles firmó una orden ejecutiva para reforzar la protección a comunidades inmigrantes y limitar la cooperación de las autoridades locales con las agencias federales.
Diversas organizaciones han convocado nuevas protestas y jornadas informativas para que los inmigrantes conozcan sus derechos. “Este tipo de operativos generan terror innecesario, sobre todo en personas que lo único que hacen es trabajar para sobrevivir”, señaló un representante de la organización CHIRLA (Coalition for Humane Immigrant Rights).
Además, abogados de inmigración advirtieron que muchos detenidos están siendo trasladados rápidamente a otros estados, dificultando el seguimiento legal de los casos y el contacto con sus familiares. La familia de Marino ha contratado asesoría legal, pero hasta ahora ICE no ha emitido declaraciones oficiales sobre el incidente.
El caso de Marino Ysidro Ramos reabre el debate sobre el uso de la fuerza por parte de ICE
Las imágenes del arresto de Marino Ysidro Ramos han generado un amplio debate en redes sociales. Algunos usuarios cuestionan la legalidad de los procedimientos de ICE, mientras que otros condenan el uso de la fuerza contra trabajadores ambulantes no armados.
Expertos en derechos humanos han señalado que, si bien ICE tiene facultades legales para realizar arrestos, las detenciones deben efectuarse de manera proporcional y respetuosa de los derechos civiles. “La situación de los vendedores ambulantes es delicada. Muchos no cuentan con estatus migratorio, pero tampoco representan una amenaza para la seguridad pública. Este tipo de acciones deshumanizan su situación”, afirmó una vocera de Human Rights Watch.
Mientras tanto, la familia de Marino continúa a la espera de novedades. Sus carritos de comida permanecen sin uso, y la incertidumbre sobre su destino mantiene paralizados a quienes dependen de él. La comunidad latina en Los Ángeles sigue vigilante, temiendo que nuevos casos como este puedan repetirse en cualquier momento.