La Fórmula 1 (F1) vivió un domingo de caos en el Gran Premio de China, cuando tres pilotos –Lewis Hamilton, Charles Leclerc y Pierre Gasly– fueron descalificados tras la carrera en el Circuito Internacional de Shanghai. La decisión de la FIA, el organismo rector del deporte, llegó después de que se detectaran infracciones técnicas en los monoplazas de Ferrari y Alpine, desatando un escándalo que ha puesto en jaque la credibilidad de ambos equipos en el arranque de la temporada 2025. El podio, liderado por McLaren con Oscar Piastri y Lando Norris, quedó opacado por las sanciones que reconfiguraron los resultados y dejaron a Ferrari con las manos vacías.
La descalificación de Hamilton, en su segunda carrera con Ferrari tras su paso por Mercedes, se debió a un desgaste excesivo en el skid block trasero de su SF-25, que incumplió el grosor mínimo exigido por el reglamento técnico de la F1. Leclerc, su compañero de equipo, y Gasly, de Alpine, fueron penalizados por una infracción diferente: sus autos no alcanzaron el peso mínimo establecido, un error que ha sido calificado como «imperdonable» por analistas del paddock. Este doble golpe para Ferrari llega tras un sábado prometedor, donde Hamilton había ganado el Sprint, alimentando las esperanzas de los tifosi en un año que prometía ser competitivo.
F1 bajo escrutinio técnico en Shanghai
La carrera en sí había sido dominada por McLaren, con Piastri liderando de punta a punta y Norris asegurando un 1-2 que refuerza su liderato en el campeonato de pilotos. Sin embargo, la atención se desvió rápidamente hacia las revisiones técnicas post-carrera, un proceso rutinario en la F1 que esta vez dejó al descubierto fallos graves. La FIA confirmó que el skid block de Hamilton estaba por debajo de los 10 mm ± 0.2 mm permitidos, mientras que los autos de Leclerc y Gasly pesaban menos de los 798 kg mínimos, incluyendo al piloto. Estas infracciones, aunque no intencionales según los equipos, son castigadas sin excepciones en el reglamento actual.
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Ferrari emitió un comunicado admitiendo un «error genuino» y prometió revisar sus procesos internos, pero la debacle ha levantado críticas sobre su preparación técnica en esta temporada de la F1. Para Alpine, el panorama es aún más sombrío: tras dos carreras, el equipo francés sigue sin sumar puntos, y la descalificación de Gasly –quien había terminado en una posición decente– agrava su crisis en el fondo de la parrilla. En contraste, equipos como Haas aprovecharon el caos, con Esteban Ocon escalando al quinto lugar tras las sanciones, un resultado inesperado para los estadounidenses.
El Impacto en la Temporada 2025 de la F1
El GP de China, segunda parada del calendario 2025, ya había generado titulares por el dominio de McLaren, pero las descalificaciones han añadido una capa de dramatismo que promete mantener a la F1 en el centro de las conversaciones. Lando Norris, con 44 puntos, sigue al frente del campeonato, mientras que Piastri, con su victoria, se consolida como un contendiente serio. Max Verstappen, de Red Bull, terminó cuarto en una carrera discreta, admitiendo que su RB21 no estuvo a la altura de los McLaren en Shanghai. George Russell, de Mercedes, completó el podio en tercer lugar, beneficiándose también del reordenamiento tras las sanciones.
Para Hamilton, el golpe es particularmente duro. Tras un arranque prometedor con Ferrari, el siete veces campeón expresó su frustración: «Ganamos el Sprint, pero hoy todo se deshizo. Es un revés, pero seguiremos adelante». Leclerc, por su parte, calificó el día como «decepcionante» y pidió al equipo encontrar soluciones rápidas. La F1, conocida por su exigencia técnica, ha dejado claro que no hay margen para errores, ni siquiera para nombres tan grandes como los de Maranello.
Ferrari y Alpine
Mientras McLaren celebraba su 50º 1-2 en la historia de la categoría, Ferrari y Alpine se enfrentaban a una crisis de imagen y resultados. Los tifosi, que habían celebrado la llegada de Hamilton como un nuevo capítulo para el equipo, ahora ven cómo las expectativas chocan con la realidad. En el paddock, las teorías no se hicieron esperar: algunos apuntan a una mala gestión de los neumáticos como causa del desgaste en el coche de Hamilton, mientras que otros cuestionan si Ferrari y Alpine subestimaron las inspecciones de la FIA en un circuito tan abrasivo como Shanghai.
El próximo Gran Premio en Japón será una prueba de fuego para los equipos afectados. Ferrari necesita demostrar que puede recuperarse, mientras que Alpine enfrenta presión para salir del fondo de la tabla. En tanto, la F1 sigue su curso, con McLaren marcando el paso y el resto de la parrilla ajustándose a un año que, apenas en su segunda carrera, ya está lleno de giros inesperados. El escándalo de China, sin duda, resonará en las semanas por venir.