Estaciones de servicio en Florida están generando controversia por aplicar recargos en gasolineras de Florida a quienes pagan con tarjeta de crédito, una práctica legal, pero poco transparente para muchos consumidores. La situación ha afectado directamente a residentes y empresarios locales, quienes denuncian una falta de claridad en la comunicación de los precios reales del combustible.
Uno de los casos más notorios es el de Pat Igo, empresario de Palm Beach Gardens, quien descubrió que el precio por galón aumentaba significativamente al momento de pagar con tarjeta de crédito. Igo, propietario de North County Cooling, una empresa con una flota de 12 vehículos, denunció que los letreros visibles desde la calle indicaban un precio menor al que finalmente le cobraron en la bomba.
Según relató, fue al acercarse al surtidor donde notó un cartel en letra pequeña que informaba de un recargo adicional de un dólar por galón en pagos con tarjeta. Al confrontar al encargado de la estación, este le confirmó que el precio más alto era correcto para transacciones con tarjeta de crédito.
Te Recomendamos
Recargos en gasolineras de Florida no siempre son informados de forma clara
La experiencia de Igo no es aislada. Una investigación del periodista Dave Bohman reveló que esta práctica se ha extendido a múltiples estaciones de servicio a lo largo de Florida. De acuerdo con las leyes del estado, estos recargos en gasolineras de Florida son legales siempre que se notifiquen adecuadamente.
“Si la información está oculta en letra pequeña o no es visible desde donde se toman decisiones de compra, no se puede considerar una práctica justa”, expresó el abogado de consumo Thomas Patti.

Vista de una gasolinera en una imagen de archivo.EFE/ Mariscal
¿Por qué existen los recargos en gasolineras de Florida?
El origen de estos recargos en gasolineras de Florida está en las comisiones que las compañías emisoras de tarjetas cobran a los comercios por cada transacción. Estas tarifas, que pueden representar entre el 1,5% y el 3% del valor total, son absorbidas habitualmente por el comerciante, pero muchas estaciones de servicio las trasladan al consumidor para no reducir su margen de ganancia, especialmente en un contexto de fluctuación en los precios del combustible.
Con los márgenes de utilidad de las gasolineras cada vez más ajustados, algunos propietarios han optado por imponer recargos visibles solo en el momento del pago, lo que afecta a quienes no llevan efectivo. Esta medida impacta aún más a los clientes frecuentes como Pat Igo, quien gasta más de 3.000 dólares al mes en gasolina para su negocio.
“El precio que ves no siempre es el que pagas”, advirtió Igo, quien comenzó a utilizar aplicaciones móviles para rastrear estaciones de servicio que no penalicen el uso de tarjeta.
Cómo evitar recargos en gasolineras de Florida
Frente a esta situación, se han popularizado estrategias entre los conductores para evitar pagar de más. Una de las recomendaciones más frecuentes es utilizar aplicaciones como GasBuddy, que permiten comparar precios de combustible por tipo de pago y ubicación. Estas herramientas también permiten filtrar estaciones por reputación, servicios ofrecidos y presencia o ausencia de recargos.
También es clave leer detenidamente los surtidores antes de insertar la tarjeta. Las diferencias de precio suelen estar indicadas en adhesivos o paneles cercanos a la pantalla de pago, aunque muchas veces en letra pequeña y poco visible. Estaciones ubicadas en autopistas o zonas turísticas tienden a imponer recargos más altos, por lo que es recomendable evitarlas cuando sea posible.
Foto: Pixabay
Crecen los reclamos por los recargos en gasolineras de Florida
El descontento entre los consumidores ha ido en aumento. Varios residentes han solicitado a las autoridades estatales que impongan reglas más estrictas sobre cómo deben informarse los precios en las estaciones. Algunos legisladores locales también han comenzado a hablar sobre posibles reformas que exijan que los precios publicados en carteles visibles desde la vía pública reflejen el costo más alto —es decir, el correspondiente al pago con tarjeta—, para evitar malentendidos.
“No pedimos que eliminen los recargos, solo que los comuniquen claramente”, expresó Igo, quien ha compartido su experiencia en redes sociales y foros de consumidores. Para muchos usuarios, lo más frustrante no es el recargo en sí, sino descubrirlo una vez que ya han cargado el combustible.
La Comisión Federal de Comercio (FTC, por sus siglas en inglés) ha señalado en múltiples ocasiones que, aunque las leyes permiten este tipo de cargos, los consumidores tienen derecho a conocer el precio final antes de hacer una compra.
Impacto en la economía diaria del consumidor
El aumento de recargos en gasolineras de Florida tiene un efecto directo sobre el bolsillo de miles de conductores. Según datos de la American Automobile Association (AAA), el conductor promedio en Estados Unidos consume entre 500 y 700 galones de gasolina al año. Un recargo de solo un dólar por galón puede representar hasta 700 dólares adicionales anuales si se paga siempre con tarjeta.
En un escenario donde el costo de vida ya representa un desafío para muchas familias, estos recargos invisibles pueden agravar aún más la presión financiera, especialmente para trabajadores que dependen de su vehículo para el sustento diario.