Comprar una casa en EE.UU. es uno de los mayores retos económicos para millones de personas, especialmente para quienes deben enfrentar el obstáculo del “enganche” o pago inicial. En medio del aumento de los precios de las propiedades y las tasas de interés, surge una buena noticia desde Illinois: el gobierno del Condado de Cook ha lanzado un programa de asistencia que otorga hasta $25,000 a quienes cumplan ciertos requisitos. La meta es clara: facilitar que más personas puedan comprar casa en EE.UU. sin verse ahorcadas por los costos iniciales.
Este programa ha generado expectativa, especialmente entre las familias trabajadoras que, pese a contar con ingresos estables, no logran ahorrar lo suficiente para cumplir el sueño de ser propietarios. Aunque está centrado en una zona específica del país, podría servir de modelo para otras jurisdicciones.
¿Qué ofrece este bono para comprar casa en EE.UU.?
El programa de asistencia lanzado por el gobierno del Condado de Cook otorga hasta $25,000 para cubrir el pago inicial de una vivienda, además de otros gastos relacionados, como los costos de cierre. El monto entregado no puede superar el 5% del valor de la casa, por lo que si una propiedad cuesta $300,000, el bono máximo sería de $15,000. Solo en casas cuyo precio supere los $500,000, el bono alcanzaría el tope de $25,000.
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Imagen de departamento. Foto: X/@DavidRealStocks
Este bono está diseñado para facilitar el acceso a una vivienda principal, es decir, no aplica para compras de inversión o segundas viviendas. Y lo mejor: si el comprador permanece en la casa durante al menos cinco años, el préstamo se condona por completo. En términos simples, es dinero gratis para quienes cumplan con los requisitos y se establezcan en el hogar adquirido.
¿Quiénes pueden recibir los $25,000 para comprar casa en EE.UU.?
Los criterios de elegibilidad son claros y no tan restrictivos como se podría pensar. Estos son los principales requisitos para acceder al beneficio:
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Tener un puntaje de crédito mínimo de 620.
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Contar con ingresos familiares que no superen el 120% del ingreso medio del área. Por ejemplo, para una familia de cuatro personas, el límite sería de $143,880 al año.
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Comprar una vivienda de una o dos unidades que se utilizará como residencia principal.
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Mantener una relación deuda-ingreso (DTI) por debajo del 50%.
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Completar un curso de educación para compradores de vivienda aprobado por HUD, especialmente si no has sido propietario en los últimos tres años.
La presidenta del condado, Toni Preckwinkle. Foto; X/@ToniPreckwinkle
Es importante destacar que esta ayuda está dirigida tanto a personas que buscan comprar por primera vez como a quienes no han sido dueños de una casan los últimos años. Por eso, incluso quienes alguna vez fueron propietarios podrían calificar, siempre que cumplan con los demás requisitos.
¿Cómo aplicar al programa para comprar casa en EE.UU.?
Las personas interesadas deben acercarse a una agencia de vivienda aprobada por HUD o consultar el portal oficial del Condado de Cook. Ahí se puede acceder a los detalles del programa, verificar si se cumplen los requisitos y registrarse para el curso obligatorio.
Este tipo de asistencia busca fomentar la estabilidad financiera y social, especialmente en comunidades de bajos y medianos ingresos. Además, reduce la barrera más difícil de superar: el pago inicial, que muchas veces se convierte en el motivo por el cual las personas siguen rentando por años.
Cabe señalar que, aunque el programa se implementa en el Condado de Cook, iniciativas similares existen en otros estados, especialmente en zonas urbanas que enfrentan crisis de vivienda asequible. Por eso, quienes estén interesados en comprar casa en EE.UU., deben investigar si en su condado hay programas locales de asistencia para compradores de vivienda.
Comprar casa en EE.UU. en tiempos de tasas altas
El programa llega en un momento complejo para el mercado inmobiliario. Según datos recientes de Freddie Mac, la tasa de interés promedio para hipotecas a 30 años se sitúa alrededor del 6.88%, lo que eleva significativamente las mensualidades y encarece el acceso a crédito para millones de familias.
En ese contexto, contar con $25,000 para el pago inicial puede marcar una diferencia abismal. No solo reduce la deuda total, sino que mejora las condiciones del préstamo hipotecario, permitiendo pagar menos intereses a largo plazo. Además, elimina la necesidad de contratar un seguro hipotecario privado (PMI, por sus siglas en inglés), lo cual representa un ahorro adicional de cientos de dólares al mes.
La presidenta del condado, Toni Preckwinkle, explicó el propósito del programa en términos sencillos: “Ser propietario de una vivienda ha sido durante mucho tiempo un pilar del sueño americano, pero hoy en día, el aumento de los precios y las tasas de interés ha dificultado más que nunca ahorrar para el enganche”. Su declaración resume el objetivo de la iniciativa: nivelar el terreno para que más familias puedan comprar casa en EE.UU.