Una nueva legislación fue aprobada por ambas cámaras del Congreso estatal de Texas con el objetivo de establecer el horario de verano permanente en todo su territorio. La iniciativa, registrada como HB 1393, solo espera la firma del gobernador Greg Abbott para convertirse en ley a nivel estatal. Sin embargo, su entrada en vigor dependerá de una autorización federal que actualmente no existe.
El proyecto de ley fue impulsado por el representante republicano Will Metcalf y propone que los relojes ya no se ajusten dos veces al año, manteniendo el horario de verano durante los 12 meses. Esta medida aplicaría tanto al huso horario central como al de montaña, que operan en distintas regiones del estado, bajo la denominación simbólica de «Texas Time».
HORARIO DE VERANO PERMANENTE EN TEXAS: QUÉ ESTABLECE LA LEY HB 1393
La ley HB 1393 modifica el Código Gubernamental de Texas al añadir una sección que permitiría al estado adoptar el horario de verano permanente. Esto significa que los habitantes del estado dejarían de adelantar los relojes en primavera y atrasarlos en otoño, eliminando por completo los cambios estacionales.
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El texto aprobado aclara que esta modificación solo podrá aplicarse si el Congreso de los Estados Unidos aprueba una ley federal que habilite a los estados a observar el horario de verano todo el año. La Uniform Time Act, vigente desde 1966, impide actualmente que un estado implemente esta medida sin autorización del gobierno federal.
Según el contenido del proyecto, el horario permanente no solo impactaría el estilo de vida de los texanos, sino también sus rutinas laborales, escolares y comerciales. La intención es reducir la fatiga derivada del cambio de hora, mejorar el aprovechamiento de la luz solar por las tardes y promover una mejor calidad de vida.
UN PROYECTO DE LARGO RECORRIDO EN LA LEGISLATURA DE TEXAS
El camino hacia la aprobación del proyecto HB 1393 comenzó en noviembre de 2024, cuando fue presentado oficialmente en la Cámara de Representantes. Tras ser enviado al Comité de Asuntos Estatales en marzo de 2025, se discutió públicamente, se escucharon testimonios a favor y finalmente fue aprobado en el pleno el 16 de abril.
En mayo de 2025, el Senado de Texas también votó a favor de la propuesta en tercera lectura, el día 22, sin modificaciones relevantes. Finalmente, el 25 de mayo quedó registrada y enviada al despacho del gobernador Greg Abbott, quien deberá decidir si firma o no la norma.
Aunque la firma de Abbott representaría un respaldo político importante, la ley no entraría en vigor automáticamente. El proyecto establece claramente que la vigencia queda supeditada a una modificación federal, algo que ha sido impulsado en paralelo desde el Congreso de Estados Unidos mediante una iniciativa conocida como Sunshine Protection Act.
QUÉ CAMBIARÍA EN TEXAS CON UN HORARIO DE VERANO PERMANENTE
De implementarse finalmente el horario de verano permanente en Texas, los ciudadanos experimentarían una serie de transformaciones cotidianas. Entre los cambios más relevantes se encuentran:
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Las jornadas tendrían más luz solar al final del día durante todo el año.
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Se eliminaría el ajuste de relojes en primavera y otoño.
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Las zonas del estado bajo horario central y horario de montaña compartirían un mismo régimen estable.
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Se consolidaría una nueva identidad estatal bajo el concepto de «Texas Time».
Expertos en salud y productividad han debatido durante años los efectos del cambio de hora en la población. Algunos estudios, como los realizados por la American Academy of Sleep Medicine, han advertido sobre los impactos negativos en el sueño, la atención y el rendimiento durante los días posteriores a los ajustes horarios. La idea de mantener un horario único busca justamente mitigar estos efectos.
OTROS ESTADOS TAMBIÉN QUIEREN HORARIO DE VERANO PERMANENTE
Texas no es el único estado que busca implementar el horario de verano permanente. Según datos de la National Conference of State Legislatures (NCSL), al menos 18 estados ya aprobaron leyes similares, todas condicionadas a la aprobación del Congreso federal. Florida, California, Tennessee, Washington, entre otros, también respaldan la idea de acabar con los cambios de hora.
La propuesta nacional más relevante en este sentido es la Sunshine Protection Act, que busca autorizar a los estados a mantener el horario de verano todo el año. La legislación, impulsada por el senador Rick Scott (Florida) y la senadora Patty Murray (Washington), ha sido presentada varias veces en el Congreso, aunque aún no ha sido aprobada de forma definitiva.
En una audiencia reciente en el Senado, el senador por Texas, Ted Cruz, se pronunció a favor de eliminar el cambio horario, alineándose con la propuesta estatal. La medida cuenta con respaldo bipartidista y ha sido bien recibida por sectores empresariales, escolares y comunitarios que buscan mayor estabilidad en los horarios.
UN ANTECEDENTE HISTÓRICO: CUANDO EE.UU. PROBÓ EL HORARIO DE VERANO PERMANENTE
No es la primera vez que Estados Unidos considera aplicar el horario de verano permanente. En 1974, bajo la administración del presidente Richard Nixon, el país realizó un experimento para mantener este régimen durante todo el año como medida de ahorro energético, en respuesta a la crisis del petróleo.
La medida, sin embargo, generó una fuerte reacción negativa por parte del público. La oscuridad en las primeras horas de la mañana, especialmente durante los meses de invierno, afectó a los niños en edad escolar y provocó un aumento en los accidentes viales. Tras un año de aplicación, el plan fue cancelado y se volvió al sistema anterior.
A pesar de ese fracaso, el debate ha regresado con fuerza en la última década, impulsado por estudios sobre salud pública, ahorro energético y productividad laboral. La pandemia de COVID-19 también aceleró los cuestionamientos sobre la necesidad de mantener prácticas tradicionales como el cambio de horario.
