Una redada migratoria en Washington desata protestas tras detenciones en una planta de bebidas ubicada en Kent, al sur de Seattle. La operación fue ejecutada por el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) y dejó como resultado la detención de 17 trabajadores, hombres y mujeres, muchos de ellos con hijos pequeños.
La acción ha provocado conmoción en la comunidad migrante del estado de Washington, donde organizaciones de derechos civiles, líderes locales y activistas han alzado la voz para denunciar lo ocurrido. Las imágenes de trabajadores esposados, algunos con grilletes en los tobillos, han generado indignación y un llamado a la transparencia sobre el proceso legal que enfrentan las personas detenidas.
La fábrica intervenida, Eagle Beverages, se dedica a la producción de tés, jarabes y sidras, y emplea a decenas de trabajadores migrantes, varios de los cuales estarían en situación migratoria irregular o en proceso de regularización.
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Redada migratoria en Washington desata protestas tras detenciones en planta de bebidas
La intervención de ICE ocurrió durante el horario laboral. Agentes ingresaron a la planta sin previo aviso y detuvieron a los trabajadores dentro de las instalaciones. En total, fueron arrestados 17 empleados: 9 hombres y 8 mujeres, según confirmó la Red de Solidaridad con los Inmigrantes de Washington (WISEN).
Foto: Gary Williams/EFE
Uno de los testimonios que más ha conmovido a la comunidad proviene de la pareja de una de las detenidas, madre soltera de dos niños, uno de ellos de apenas semanas de nacido. “No sé cómo voy a cuidar a los bebés sola”, expresó entre lágrimas a medios locales.
La redada ha generado movilización inmediata por parte de organizaciones comunitarias, abogados de inmigración y líderes religiosos. La WISEN activó sus líneas directas de emergencia y está brindando acompañamiento legal a las familias afectadas.
“El operativo fue desproporcionado y traumático para toda una comunidad que ya vive con miedo constante”, expresó el abogado Luis Cortés Romero, quien compartió imágenes de los trabajadores detenidos en fila, esposados y custodiados por agentes.
Redada migratoria en Washington desata protestas tras detenciones sin notificación previa
La falta de información previa sobre la redada ha sido uno de los principales motivos de reclamo. Grupos comunitarios denunciaron que no hubo notificación oficial a los empleadores ni a las organizaciones de defensa de derechos humanos antes de la operación, lo que impidió activar protocolos de asistencia inmediata.
Activistas de inmigración señalan que este tipo de acciones alimentan la desconfianza hacia las autoridades y generan un efecto dominó en las familias migrantes, muchas de las cuales dependen del ingreso de los trabajadores ahora detenidos.
Foto: Erik S. Lesser/EFE
“Estas redadas no solo detienen personas, también desestabilizan comunidades enteras. Hijos que se quedan sin padres, familias sin sustento, trabajadores que pierden años de esfuerzo por un operativo repentino”, explicó en rueda de prensa la vocera de la organización OneAmerica, con sede en Seattle.
La fábrica Eagle Beverages, por su parte, no ha emitido un comunicado oficial sobre el incidente, y no se sabe si colaboró con las autoridades o si está bajo investigación por contratación irregular.
Redada migratoria en Washington desata protestas tras detenciones que reavivan debate sobre derechos laborales
La redada migratoria en Washington desata protestas tras detenciones que, según especialistas, ponen en evidencia las grietas del sistema migratorio de Estados Unidos. Aunque ICE sostiene que la operación fue parte de una investigación sobre contratación ilegal, líderes de derechos humanos reclaman mayor respeto por el debido proceso.
En estados como Washington, donde existen políticas de santuario y gobiernos locales que han buscado proteger a las comunidades migrantes, este tipo de acciones son percibidas como una amenaza directa.
“El problema de fondo es que muchos trabajadores migrantes, incluso quienes pagan impuestos y tienen hijos nacidos en EE.UU., siguen expuestos a detenciones sin previo aviso”, afirmó el abogado Cortés Romero. “Se necesita una reforma migratoria real que no los trate como criminales por trabajar”.
Los abogados que asisten a los detenidos han informado que algunos de ellos ya fueron trasladados a centros de detención fuera del estado. Esto complica el acceso de sus familiares y defensores, lo cual es una estrategia habitual que ha sido duramente cuestionada por organizaciones como la ACLU.
Mientras tanto, varias iglesias en Kent y Seattle han abierto sus puertas para brindar refugio temporal a familiares de los afectados, especialmente a niños y mujeres embarazadas. También se están recolectando fondos para cubrir costos legales, de transporte y alimentación.
Las protestas frente a las oficinas de ICE en Seattle continúan. Los manifestantes exigen la liberación inmediata de los trabajadores, garantías legales y una revisión de las políticas migratorias federales que permiten operativos de esta naturaleza.