Musk congela proyecto clave para NASA tras presión de Trump
La relación entre Elon Musk y el presidente Donald Trump ha llegado a un punto crítico esta semana, luego de que el empresario anunciara la suspensión del programa Dragon, una cápsula espacial desarrollada por SpaceX que ha sido esencial para las misiones de la NASA hacia la Estación Espacial Internacional (EEI). El anuncio fue realizado por el propio Musk a través de su cuenta en X, en respuesta directa a una amenaza de Trump de poner fin a todos los contratos gubernamentales con el empresario.
“Es hora de terminar con los subsidios a Elon”, escribió Trump en Truth Social. La declaración encendió una ola de tensiones entre ambos líderes, culminando con la decisión de Musk de congelar el desarrollo activo de Dragon, considerada una de las principales herramientas de transporte de la NASA en la última década.
EE.UU. depende de SpaceX para sus misiones espaciales
Te Recomendamos
Desde que el programa de transbordadores espaciales de la NASA fue retirado en 2011, la agencia espacial ha dependido casi exclusivamente de SpaceX para enviar y traer astronautas y materiales desde y hacia la EEI. Solo en marzo de este año, la cápsula Dragon fue utilizada para repatriar a los astronautas Butch Wilmore y Suni Williams, tras varios meses en órbita.
La suspensión del programa Dragon representa un revés significativo para las operaciones de la NASA, que mantiene con SpaceX contratos por miles de millones de dólares. En los últimos diez años, la empresa de Musk ha recibido más de 17.000 millones de fondos federales para desarrollar capacidades aeroespaciales, incluidas misiones tripuladas y no tripuladas.
Ruptura política entre Musk y Trump se vuelve pública
Aunque Elon Musk y Donald Trump compartieron hasta hace poco una alianza política sólida, las diferencias en temas fiscales y energéticos provocaron una ruptura. La semana pasada, Musk renunció como jefe del Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE), una oficina creada por Trump para reducir el gasto público.
Pese a una aparente despedida amistosa en la Casa Blanca, las tensiones escalaron rápidamente. Este jueves, Trump expresó su decepción por la actitud del empresario. “Estoy muy decepcionado de Elon. Le he ayudado mucho”, dijo desde el Despacho Oval. Aseguró que el distanciamiento podría estar motivado por la eliminación de créditos fiscales a los vehículos eléctricos, medida incluida en un nuevo proyecto de ley fiscal que Musk ha criticado duramente.
Ataques cruzados en redes reflejan un quiebre sin retorno
Musk ha intensificado sus críticas hacia la administración Trump en redes sociales. A través de su cuenta en X, calificó el nuevo plan fiscal del mandatario como insostenible y publicó un mensaje satírico con la frase “Slim Beautiful Bill para la victoria”, haciendo alusión irónica al título oficial del proyecto de ley “Big Beautiful Bill Act”.
Trump, por su parte, sugirió que Musk podría estar actuando por nostalgia de su papel dentro del gobierno. “No es el primero que deja mi administración y después la extraña muchísimo”, comentó el presidente. También dijo que aún mantiene respeto por el empresario, aunque reconoció que la relación ha cambiado.
La NASA, en la mira ante posible vació tecnológico
La decisión de Musk de congelar la cápsula Dragon genera incertidumbre en la comunidad científica, especialmente en la NASA, que no ha emitido un pronunciamiento oficial. Actualmente, no existe otra alternativa estadounidense plenamente operativa para transportar astronautas a la EEI. El sistema Starliner de Boeing aún enfrenta problemas técnicos, y las alternativas internacionales son limitadas.
La medida también podría impactar futuros lanzamientos programados para este año. La cápsula Dragon ha sido utilizada tanto en misiones tripuladas como en el envío de suministros y experimentos científicos, convirtiéndose en una herramienta esencial para la continuidad de la investigación en órbita.
Con el conflicto entre Trump y Musk escalando, expertos advierten que decisiones políticas pueden afectar el liderazgo de Estados Unidos en el ámbito espacial. Todo apunta a que la relación entre el presidente y el empresario, que en algún momento fue una alianza estratégica, atraviesa su momento más tenso desde la llegada de Trump nuevamente a la Casa Blanca.