Con temperaturas superando los 100°F en Nueva York y otras ciudades de Estados Unidos, la ola de calor de junio de 2025 está empujando a muchos a buscar formas rápidas de refrescarse. Sin embargo, un hábito común como tomar una ducha fría podría no ser tan seguro como parece, según expertos en salud.
Extreme #heat is ongoing this afternoon from the lower/middle Mississippi Valley to the East Coast as highs reach well into the 90s and heat indices soar into the triple digits. Dangerous temperatures are set to continue this week. See the attached Key Messages for more info. 🥵 pic.twitter.com/LRuLFlqMiZ
— NWS Weather Prediction Center (@NWSWPC) June 23, 2025
Un estudio destacado por el profesor Adam Taylor de la Universidad de Lancaster revela que las duchas con agua helada durante una ola de calor pueden alterar los mecanismos naturales del cuerpo para regular la temperatura, poniendo en riesgo especialmente a personas con problemas cardíacos. Aquí te contamos por qué debes tener cuidado y qué alternativas seguras puedes usar para mantenerte fresco.
¿Por qué las duchas frías son riesgosas?
Cuando estás expuesto al calor extremo, tu cuerpo trabaja arduamente para mantener una temperatura interna estable. Al tomar una ducha con agua muy fría, los vasos sanguíneos de la piel se contraen rápidamente en un proceso llamado vasoconstricción. Esto reduce el flujo de sangre hacia la superficie, atrapando el calor en el núcleo del cuerpo. En lugar de enfriarte, tu temperatura interna puede permanecer elevada, lo que podría dañar órganos vitales si no se regula adecuadamente.
Fotografía de un hombre refrescándose ante las altas temperaturas en Washington, EE.UU. EFE/ EFE/ Michael Reynolds
Además, el agua helada puede desencadenar una respuesta de choque por frío, especialmente si está por debajo de los 15°C. Este fenómeno provoca un aumento brusco de la presión arterial y obliga al corazón a trabajar más, lo que puede ser peligroso para personas con afecciones cardiovasculares. Según Taylor, en casos extremos, esta transición repentina del calor al frío podría incluso inducir arritmias o, en situaciones graves, un paro cardíaco. Aunque estas complicaciones son raras, el riesgo es mayor para adultos mayores o quienes tienen condiciones preexistentes.
Alternativas seguras para combatir la ola de calor
No significa que debas evitar ducharte por completo. Los expertos recomiendan optar por duchas tibias o ligeramente frescas, que permiten enfriar el cuerpo de manera gradual sin causar un impacto drástico. Pero hay muchas otras formas de mantenerte fresco durante una ola de calor sin poner en riesgo tu salud. Neha Raukar, médica de urgencias de la Clínica Mayo, sugiere mantenerse hidratado bebiendo agua constantemente, incluso si no sientes sed. Evita el alcoholy el café, ya que pueden deshidratarte más rápido.
Personas transitan por una calle en la que se empieza a sentir la ola de calor que afecta a Estados Unidos, este 23 de junio de 2025, en Washington. EFE/Jim
Otro consejo es usar ropa ligera de colores claros y tejidos transpirables como el algodón, que ayudan a reflejar el calor. En casa, mantén las persianas o cortinas cerradas durante el día para bloquear los rayos solares. Si no tienes aire acondicionado, busca lugares públicos con enfriamiento, como bibliotecas, centros comerciales o cines. También puedes aplicar paños húmedos en áreas como el cuello, las muñecas y las axilas para bajar la temperatura corporal de forma segura.
¿Cómo proteger tu hogar y a los más vulnerables?
Para mantener tu casa fresca sin depender exclusivamente del aire acondicionado, prueba un truco sencillo recomendado por expertos en eficiencia energética. Coloca un ventilador apuntando hacia una ventana abierta para expulsar el aire caliente y otro en una ventana opuesta para atraer aire más fresco, creando una corriente cruzada. Este método, respaldado por el Ministerio de Sanidad de España, puede reducir significativamente la temperatura interior.

Los grupos más vulnerables durante una ola de calor, como niños pequeños, personas mayores y aquellos con enfermedades crónicas, necesitan atención especial. Los niños tienden a sobrecalentarse rápidamente, mientras que los adultos mayores tienen menos capacidad para regular su temperatura, según estudios de The Lancet Planetary Health. Asegúrate de que estén en espacios frescos, bien ventilados y con acceso constante a agua. Las mascotas también son susceptibles al calor extremo; manténlas en áreas sombreadas y con agua fresca disponible.
Si notas síntomas de un golpe de calor, como mareos, confusión, náuseas o piel caliente, actúa de inmediato. Lleva a la persona a un lugar fresco, aplica compresas húmedas y llama al 911 si los síntomas persisten o empeoran. Con estas precauciones, puedes disfrutar del verano y proteger tu salud durante esta intensa ola de calor que afecta a millones en 2025.